Me quito el alma para secarla, está empapada de soportar tantos llantos y noches sin dormir, la escurro como si fuera un trapo viejo y mientras me limito a observar cómo mis lágrimas se escapan por el fregadero me da por recapacitar y empiezo a reír, ahora es cuando todo cobra sentido....
Ahora entiendo porque le puse Soledad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario